martes, 25 de agosto de 2009

SENSACIONES



Cada día que pasa experimento una sensación diferente después de habernos conocido, haberte dado el primer beso, acariciar la fragancia de tú ser, sentir el aroma de tú aliento, y comenzar a extrañarte, a pesar de que vivo atado a ti.
Sensaciones que sólo se pueden volver a experimentar cuando el amor te golpea nuevamente, y todo aquello que pasó con otra alma, con otra ilusión, queda enterrado en el olvido, en lo que nunca debió haber sido.
Ahora es ésta nueva imagen de mujer y el placer de saber que somos correspondidos, y que de a poco nos vamos conociendo. Es increíble lo bien que me hace cada caricia tuya al alma, así como yo a tú esencia.
Todo es lento, es volver a empezar, pero hay en ti, algo tan sublime que, todo ese cúmulo de sensaciones que experimentamos nos da la seguridad de lo que va a venir y cómo seguir adelante.
No percibimos desconfianza, ambos nos entregamos totalmente como aquella inocencia juvenil que todo lo admite y todo lo cree, porque fue algo puro que nació de un encuentro casual, nada elaborado ni premeditado.
Nuestras miradas se cruzaron en ese espacio infinito del amor, y sucedió lo mágico de la atracción, el corazón palpitando y reclamando al ser, el perfume que me sedujo, tus caricias.
Sensaciones que sanan el alma, emociones que erizan la piel, tus ojos, esa sonrisa angelical, y mis manos tomándote de la cintura al ritmo cadente del paso por las calles empedradas de la antigua ciudad.
La vida, o cupido, o la necesidad de algo fue lo que nos puso en esta nueva senda de amor, ilusiones y esperanzas. Mismas historias pasadas, mismos deseos del continuo por lo nuevo, y esa fuerza insaciable de pasión.
Tu belleza me atrapó, pero fue esa inspiración del alma que llegó a mí a través de tus palabras, del susurro de nuevas letras para estas poesías que narrarán lo profundo de cada parte de nuestro ser, tú amor que ahora está dentro de mí.
Sensaciones que conmueven, e impresiones que dejan marcas cómo aquella tinta que, letra a letra seduce a cada palabra que describe tanta belleza entre mis manos. Sólo me resta seguir amándote y hacerte mía en todos mis sueños.

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